¿Quién no necesita un suelo sobre el que andar? Esta pregunta parece una obviedad, pero el hecho de que se trate de una de las necesidades básicas en el acondicionamiento de cualquier espacio, hace que muchas veces no se piense en él. Lo cierto es que las viviendas, los establecimientos, las fábricas, las oficinas… no nacen con suelo y su instalación se hace únicamente tras el estudio de cuál es la mejor opción según las características del local. La instalación de los suelos técnicos es un buen ejemplo de cómo los profesionales eligen lo mejor para cada espacio.
¿Por qué son importantes los suelos?
Poco se suele pensar en los suelos como algo importante a la hora de construir un espacio, pero lo cierto es que se trata de una de las zonas a las que más atención hay que prestar para que el resultado final del conjunto sea perfecto. Cada suelo requiere de unas características determinadas y no todos son adecuados para cualquier lugar. Por ejemplo, los espacios de trabajo que, por su compleja naturaleza, necesitan de muchas instalaciones industriales tendrán un suelo técnico. Los suelos técnicos están hechos con unos objetivos y materiales determinados y sus particularidades los hacen convenientes para su uso en lugares de mucho tránsito y constante evolución. ¿Quieres saber más?
El suelo en espacios de trabajo
Las oficinas, los lugares de trabajo más comunes, son espacios extremadamente complicados. Por eso, tienen que ser flexibles (siempre abiertos a reorganizaciones de todo tipo). Es muy difícil que en una oficina todos los puestos de trabajo queden estáticos durante años. Siempre entra gente nueva, se marcha, se renueva el mobiliario, se añaden equipos informáticos, teléfonos, máquinas… y el suelo tiene que estar preparado para soportar todos esos cambios sin que el aspecto del local sufra daños mayores.
Si cerramos los ojos y pensamos en una oficina, ¿a que no se nos viene a la cabeza la imagen de cables en medio de la sala y su consecuente apariencia de caos y desorganización? Eso es porque la mayoría de ellas cuentan con suelos técnicos. Ocultar el cableado es uno de los mayores desafíos actualmente ya que, tanto por motivos de imagen, como de seguridad, conviene que el cableado quede oculto bajo el suelo pero que, a su vez, sea accesible en todo momento. Éste es uno de los objetivos de los suelos técnicos: asegurarse de que el cableado no se vea, pero que no sea difícil llegar hasta él.
El suelo técnico
El suelo técnico es algo tan sencillo como una baldosa, o módulo, sujetada por una estructura que se coloca a modo de suelo falso sobre el suelo real. Algo muy ingenioso, que se adapta a todas las superficies (incluso con irregularidades) y que cuya parte pisable puede tener distintos colores o texturas, según el gusto del comprador y el mantenimiento que le quiera dar (moquetas, flotex, linóleum, cerámicos, granito, cerámico, madera, pvc)… Su mayor ventaja: que por debajo de él pueden esconderse cables, tuberías e instalaciones de aire acondicionado sin que se vean ni interfieran con las personas que ocupan el lugar. Y no sólo eso, sino que además es accesible en cualquier momento con un simple movimiento para levantar el módulo.
Cuando se instala correctamente, entre el suelo real y la parte inferior del suelo técnico se crea un espacio, llamado plenum, que está destinado a alojar cualquier infraestructura técnica (cableado, tuberías…etc). Además, gracias a que todos los paneles son iguales, pueden intercambiarse en todo momento garantizando la accesibilidad desde cualquier punto de la instalación y también la flexibilidad, ya que permite que en todo momento se puedan mover los puestos de trabajo, las estructuras y realizar con éxito futuras modificaciones en las instalaciones.
Tipos de placa en los suelos técnicos
Las placas (o baldosas) que componen el suelo técnico pueden ser de sulfato, que están compuestas por paneles modulares de este elemento. Éstas son adecuadas para ambientes de trabajo, como oficina y de dirección. Pueden combinarse con acabados cerámicos y pétreos pero, por su uso, son mejores los acabados ligeros y laminados. Su grosor puede variar pero lo que siempre se mantiene igual, son sus prestaciones físico-mecánicas: es muy resistente al fuego y logra una gran reducción acústica.
Las baldosas también pueden estar compuestas por aglomerado. En este caso, las baldosas están compuestas por alma de madera prensada, canto de PVC y una lámina de acero galvanizado en su parte inferior. Este panel es oportuno para entornos de trabajo en los que las prestaciones físico mecánicas son de nivel medio y en los que no hay mucha humedad. Tanto para su instalación como para su mantenimiento es mejor limitar el uso del agua. Como en todos sus productos, Instalaciones Torrejón sólo trabaja con aglomerados de primera calidad.
Revestimiento en los suelos técnicos
Como ya hemos mencionado, la parte sobre la que pisamos del suelo técnico puede tener diferentes colores y texturas. Existe una amplia gama de revestimientos superiores que se ajusta a las necesidades de cada cliente.
PVC: El PVC es conocido por su buena resistencia a la abrasión, al desgaste, a los líquidos y por su facilidad para limpiarlo. Tiene una vida útil de 10 años y, por lo tanto, está considerado como uno de los revestimientos que mejor relación calidad-precio proporciona.
Estratificado: Los estratificados son populares por su precio, mucho más económico que otros revestimientos. Está recomendado en suelos con bajo-medio tránsito ya que la calidad es media y pueden sufrir mayor desgaste.
Linóleo: Los revestimientos de linóleo son de excelente calidad y su precio es, a su vez, bastante asequible. Además, gracias a su acabado, su conservación y su mantenimiento son muy fáciles. Son resistentes al tránsito elevado e idóneos para instalar en zonas públicas como, por ejemplo, hospitales. También se utiliza en exteriores, ya que su dureza es máxima.
Cerámico, Piedra natural: Para lugares en los que hay un tránsito elevado o mucha humedad, también son muy recomendados los revestimientos de cerámico o piedra natural. Quedan muy bien y son ideales para zonas nobles.
Madera natural: Los revestimientos de madera natural son muy visuales y decorativos. Están formados por planchas de madera natural barnizada y son perfectos zonas nobles en las que se desee dotar al espacio de especial distinción y elegancia. Su resistencia es media, así que su mantenimiento será mayor.
Acero: También conocido como suelo técnico encapsulado. Es una bandeja cerrada por todos los lados con acero. Está especialmente diseñada para ser cubierta con moqueta o pvc.
¿A quién acudir?
Tras leer todas las ventajas de los suelos técnicos podemos decir que la palabra perfecta para describirlos es: funcionalidad. Una combinación de factores hace que se traten de superficies estables que soportan el peso y que resisten al paso de los años. Si necesitas más información sobre los suelos técnicos y detalles sobre sus ventajas o su colocación, no dudes en consultar al equipo de profesionales de Instalaciones Torrejón S.L. de Madrid. Recuerda que sus aplicaciones son ilimitadas e incluyen oficinas, centros de cálculo, bancos, aulas, teatros, colegios, laboratorios, hospitales, call-centers, talleres de imprenta …
